Vuelta Rápida GT

“Milagritos, te dejo un niño, devuélveme un hombre” Eso es al menos lo que le decía un fornido ex-policía a otro personaje de una de las mejores películas del cine español de la pasada década.

Texto y Fotos: Fernando González Ferreira. @FUR_R .

Y es que hay momentos en los que un niño pasa a ser un hombre. Momentos en los que se exige ese esfuerzo extra, esa concentración de más, esa perseverancia y aguante que hacen que esa persona al pasar ese trance, sabe y hace saber que podrá volver a repetirlo si fuese necesario y con la misma solvencia. El primer examen, la primera ruptura seria, la primera aventura sin supervisión, todas esas cosas nos cambian y ya no volvemos a ser los mismos.

Luego hay otros momentos que son más bien todo lo contrario. Experiencias que nos hacen volver a esa versión 1.0 de nosotros mismos y disfrutar sin ningún tipo de decoro o educación. El MINI COOPER S, con el kit JCW habla exactamente de esto último.

El Señor COOPER S.

Si has probado cualquier MINI One, te habrás dado cuenta de que es un producto diferente. Tiene tamaño de utilitario, potencia de utilitario, pero una puesta en escena tanto interior como exterior muy particular. Se puede decir que este Mini de acceso, con un par de “recomendaciones”, puede ser un coche apto para cualquier principiante.

El MINI Cooper, como si fuese un adolescente, acentúa todavía más esas características que tanto nos gusta de la marca, acentúa el carácter y lo hace de una manera incipiente y vistosa, como una espinilla en la punta de la nariz.

Y llegamos al Cooper S, que  ya merecería el nombre de “Señor Mini”. No hablamos de un “Señor MINI” por la potencia que ofrece, que también, sino por su comportamiento, limitadas concesiones al confort y un motor de 4 cilindros sobrealimentado tan lleno abajo que impresiona por su fuerza en todas las marchas.

Pero puede que en ese “proceso de crecimiento” el producto más maduro sea el John Cooper Works, y lo es en cualquiera de sus envases; Hatchback, Countryman o Paceman, pero puede que, por precio o por consumos, tu cuenta pude llegar a parecerse a una de ahorro infantil o puede que a tu edad tu familia no transija con un coche de estas características. Pues buenas noticias.

Vamos a enseñar a desaprender cómo se deshacen las cosas.

Gloriosa frase del más glorioso programa infantil de los 80 llamado “La Bola de Cristal”, pero a lo que vamos; No hace falta un JCW, no hace falta tanta seriedad, tanto poderío ni tanto dinero para recuperar la emoción que sentimos con nuestro primer regalo de reyes, con nuestro primer viaje en montaña rusa, con nuestra primera noche fuera de casa, porque cuando llegamos a cierta madurez pocas cosas pueden sorprendernos, así que a veces es mejor viajar hacia atrás en el tiempo, dejar que las agujas giren en sentido contrario y volvernos unos niños que reciben su mejor juguete.

Todo, todo eso, lo consigue el Kit de potencia JCW por el módico precio de 1.942 euros sobre el coste de un Cooper S. Naturalmente podrías mejorar tu juguete con todavía más accesorios como los que llevaba nuestra unidad de prueba, que subirían la factura casi 6.000 € más, pero nos vamos a quedar con el más importante.

El botón de la risa.

Naturalmente el Kit JCW básico aumenta la potencia máxima del Cooper S de 192 cv. a 208 cv. y el par disponible de 280 Nm a 300Nm en función de la marcha engranada, y está disponible para el mini 3 puertas, el 5 puertas y el Cabrio, pero eso tampoco es relevante.

Lo que realmente hace de este KIT un juguete en sí mismo es el sistema de escape dinámico por válvula de mariposa que convierte el elegante petardeo tan MIN en un estruendoso festival pirotécnico sólo apto para circuito.

Insisto en “sólo apto para circuito” porque si activas el “botón de la risa” se modifica la geometría del escape puenteando el silencioso final, haciendo que el sonido salga casi sin reducción alguna. Si te para la autoridad con ese botón inalámbrico parpadeando y te ponen un sonómetro sin duda estarás superando los decibelios con los que hubiera sido homologado este coche.

Cuando hayas pulsado el botón de la risa pasarás por alto lo durísimo que va, lo sensible al asfalto que es, lo muchísimo que correría si estuvieses rodando en un circuito. Perdón, ¿qué haces pulsando el botón de la risa en carreteras abiertas? ¿No te he dicho que no estaba permitido?.

Porque en carreteras abiertas el Cooper S KIT JCW se muestra muy nervioso y delicado incluso en seco. Durante la prueba realizamos el mismo recorrido con un Fiesta ST200 y nos pareció que en condiciones de asfalto digamos normal, era mucho menos estresante enlazar curvas que con el MINI, pero no olvidemos que hemos vuelto atrás en el tiempo y quienes conducimos este MINI ahora tenemos 8 años y sólo pensamos en esos gorgoteos y detonaciones que llenan de emoción los túneles. Pero ¿No te había dicho que sólo se podía usar en circuito?.

Por dentro, como todo MINI, el límite lo pone tu imaginación, con el emblema de la Union Jack allá donde mires, con la bandera ajedrezada en alfombrillas, laterales y techo, pespuntes rojos, y por fuera faros adicionales sobre la calandra, molduras de carbono, más spoilers que en juego de tronos,… y ese botón. Ese botón que has vuelto a pulsar porque no puedes evitar hacerlo por mucho que esté prohibido en la etiqueta amarilla con un triángulo negro de advertencia que te recuerda que no debes usarlo fuera de un circuito, la verdad contradice un poco a la tira de tela junto a él que por su parte reza “Las carreras están en nuestra sangre” PUES CLARO QUE LO HE VUELTO A PULSAR!. Y lo seguiría pulsando! porque el juguete es mío y lo uso cuando quiero!.

Llegado a este momento de la prueba, me siento tan absolutamente intratable que no obedezco ni a mi padre, me da igual que me castigue la benemérita con una multa o con dejarme una semana sin televisión, seguiré pulsando el botón porque es lo mejor del coche, porque me ha hecho falta muchos años para descubrir que sólo siendo un niño se puede disfrutar totalmente un mini equipado con el KIT JCW.

FICHA TÉCNICA

MINI Cooper S KIT KCW