Mitsubishi Outlander Motion 2WD 200 MPI CVT. Un SUV “Radical”.
Huye de los convencionalismos, huye de las modas, ignora lo que piense la gente, vive tu vida de una manera radical. Este podría ser el eslogan de un patinete a […]
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Huye de los convencionalismos, huye de las modas, ignora lo que piense la gente, vive tu vida de una manera radical. Este podría ser el eslogan de un patinete a […]
Huye de los convencionalismos, huye de las modas, ignora lo que piense la gente, vive tu vida de una manera radical. Este podría ser el eslogan de un patinete a reacción, pero perfectamente se podría aplicar al Mitsubishi que os traigo hoy.
Texto y Fotos Fernando González Ferreira. @FUR_R
¿Radical? Os preguntaréis. ¿Un SUV de 150 cv. con motor de gasolina y tracción delantera es radical?. Mirad la definición de “Radical” en la RAE y seguid leyendo.
Bueno, ya os lo pongo yo:
Efectivamente, la acepción de este adjetivo que más usas (y que la publicidad intenta meternos por los ojos a todas horas) es la quinta: Extremo, tajante, intransigente. Pero este modelo básico del Nuevo Mitsubishi Outlander habla de las primeras 3.
No está claro cuándo nacieron los SUV. Hay quien dice que fue el Forester el primer SUV, hay quien dice que fue el Chevrolet Carryall Suburban, el Jeep Willis, el 2cv,… Todos tienen parte de razón porque todos esto modelos tan dispares tienen dos cosas en común, la primera es obvia, y es que podían salir del asfalto con la confianza de poder volver a él y la segunda, menos obvia, es que en su origen eran modelos bastante espartanos.
Hoy en día si un SUV no tiene asientos refrigerados, cámaras, radares y conexión a internet parece que ya no merece respeto. Y eso es porque los SUVs hoy en día se han convertido en símbolos de status, no de, como su propio nombre indica, “vehículos de uso deportivo” salvo que aparcar delante del gimnasio sea considerado “uso deportivo”.
Por eso este Outlander es radical. Porque es el modelo básico, el más sencillo y espartano, tiene dos ruedas motrices, como los pioneros, y puede salir del asfalto y volver a él sin llamar a la grúa y tiene lo que tiene que tener un SUV.
Si, pero es que viene pelado…
A ver: Sistema de navegación multifunción con pantalla táctil de 7 pulgadas, Cámara de aparcamiento trasero, Sistema de monitorización de presión de neumáticos, Retrovisor interior fotosensible. Sistema de parada y arranque automático (AS&G), Cruise Control (control de velocidad de crucero). Transmisión automática CVT. Levas del cambio ubicadas en el volante, entre otras muchas cosas.
Si estas pensando en comprarte un coche, piensa en cuánto de este equipamiento tiene el coche que todavía tienes en el garaje. Pues eso. El tema es que, una vez más, lo común no es lo normal, y lo esencial no es la media de lo que tienen todos tus vecinos.
También conviene que te fijes en el espacio que te ofrece y cómo te lo ofrece. Con 5 plazas de verdad y un maletero que no sólo puede llevar su equipaje, sino que además permite un suelo de carga plano hasta los asientos delanteros y un doble fondo con 5 compartimentos en los que organizar tu maletero o simplemente encajar las bolsas de la compra.
Por eso la versión 2wd CVT del Outlander es “radical”, porque contiene lo fundamental y lo esencial.
El Outlander 4×4 6AT Kaiteki, que es el tope de gama del Outlander (sin contar el PHEV) cuesta 10.900 euros más que el nuestro. Por ese precio te puedes comprar un Space Star.
Efectivamente, recorriendo el interior del 2wd Motion encontrarás unas cuantas tapas negras que te recuerdan que este modelo puede equipar mucha más tecnología que la que has pagado, unas tapas que en otras versiones albergarían el mando de la tracción total, el freno de mano eléctrico, la calefacción en volante y los asientos, el asistente de ángulo muerto, la apertura eléctrica del portón… pero insisto que el equipamiento de este Outlander básico es más de lo que puedes esperar de un compacto de su precio
Este es el 4º Outlander que probamos, y si hay dos cosas que nos quedan claras es que ha mejorado tras el restyling a nivel de sonoridad y confort de marcha y que al volante se percibe tan sólido y bien hecho como cualquier tope de gama con la motorización más potente.
Por eso este Outlander de 22.650 € (Pive, descuento y financiación incluida) es radical porque sigue siendo todo un Outlander y por supuesto un SUV completo.
Sí, este Outlander es radical. Porque olvida convencionalismos de que un SUV tiene que ser un diésel y se conforma con un motor de gasolina atmosférico de dos litros y 150 cv. Un motor que claramente no tiene el par que ofrece el D-iD de su hermano de gasóleo, pero que en conjkunción con su caja de cambios CVT de variador contínuo ofrece un agrado de conducción cuando esa es tranquila que te parecerá que vas en un híbrido.
Naturalmente no serás capaz de realizar los cambios de ritmo con la solvencia de un diésel, pero no a causa de sus 150 cv. sino a sus escasos 195 Nm de par, ya que estamos hablando de un motor atmosférico.
La dinámica del conjunto se resiente también por el particular funcionamiento de su caja de cambios, ya que equipa una caja CVT. Estas cajas van mucho mejor con las mecánicas diesel que con motores de gasolina, ya que en ellos el par máximo y la potencia máxima se desarrollan en un régimen que abarca escasamente 800 rpm ( un diesel a 2.800 rpm mantiene el par máximo y la potencia máxima llega a las 3.600 rpm), mientras que en el caso del 2.0 MPI de Mitsubishi la potencia llega 2.400 rpm después de que el par haya empezado a caer.
Al final el funcionamiento de la caja CVT del Outlander es similar la de Subaru o Nissan, lo que prima es la suavidad, pero no alcanza el agrado de uso en lineal de la Lineartronic de Subaru ni la emulación de marchas de la de Nissan. A cambio, lo que sí obtendrás en el Outlander es la sensación de ir en un híbrido siempre que trates con mimo el acelerador.
Un acelerador que te exigirá un período de adaptación. Primero por aceptar que revoluciones y velocidad no van unidas y en segundo lugar que no acelerarás más por pisar a tope. Es una sensación similar a la de cargar un turbo grande; prevés con unos segundos de antelación el adelantamiento que vas a realizar, pisas al 50% para que acorte la relación, ahuecas ligeramente para que la alargue y el volante de inercia te dará ese puntito más de “arrastre” mientras aceleras progresivamente para completar la maniobra.
Parece complejo, pero al final de los 500 km. que pude conducir este Outback durante la prueba le acabé cogiendo el truco. Bueno, a eso y a gestionar las salidas de los semáforos, ya que si el motor no es muy brioso en marchas largas, saliendo desde parado te sorprenderá por su reprise en los primeros metros, casi como un eléctrico.
También te sorprenderá su autonomía. Más de 700 km en un gasolina no es algo que se vea todos los días. Si bien el mérito lo tiene más su depósito de 63 litros que su consumo, que puede estar entre 7 y 8 litros en una conducción normal.
No, no es un coche perfecto, pero es fiel a los orígenes de los SUV, y gracias a eso es diferente a todo lo demás y cuenta con una ventaja, una relación precio equipamiento que ningún otro modelo de este tamaño te puede ofrecer en el mercado.
Sé radical, rompe con lo preestablecido, deja el diésel para las calderas y la tracción total para los todoterrenos.
Si has optado por un SUV, esto es lo que obtendrás: Una dinámica de Suv, un comportamiento de SUV y un espacio interior de SUV. Este Outlander no te engañará, aunque puede que sí lo haga a todos tus vecinos, que pensarán que te has comprado un coche entre 5.000 y 10.000 € más caro.
Si además de leernos quieres escucharnos, aquí te dejamos el link al programa de radio Vuelta Rápida GT en el que hablamos de este SUV tan… Radical a su manera. A partir del minuto 99.