Vuelta Rápida GT

Reconozco que me encantan los SUV. Si eres oyente habitual del programa, ya tienes claras las preferencias de cada uno. Caballo grande, ande o no ande, pero… ¿A cualquier precio?

Puede que me encuentre ante uno de los SUV que más dudas me ha generado como concepto en sí mismo. Ahora te cuento por qué…

Por Ramón Biosca  @ramonbiosca . Fotos: Fernando González Ferreira @FUR_R .

Me declaro fan de la gama X de BMW. Eso es irrefutable. Su presencia, su comportamiento, el dinamismo del que hacen gala, sus aptitudes off road… Todo ello hace que sea una gama que me encanta dentro de la marca bávara.

Pero cuando me enteré de que el buque insignia de la gama X (junto con el masivo X6) iba a tener una versión de “acceso” (y pongo “acceso” entrecomillado, porque decir eso de un coche de casi 60.000 € es un poco atrevido), no sabía por dónde iban a ir los tiros.

Entiendo que la intención de BMW era bajar el precio de la cuenta final por debajo de los 60.000 €. Pero hacer eso renunciando a los seis cilindros y a la tracción integral no sé si me acaba de convencer. Pienso que es una apuesta bastante arriesgada…

Porque, aunque sea indiscutible que estamos ante un BMW de altísima gama (no hay más que abrir la puerta e introducirse en su fastuoso interior), no deja de ser un coche enorme, y concebido para un uso mixto entre el asfalto y los caminos que encontramos fuera de él. Nos encontramos con un eficaz, eso sí, motor de cuatro cilindros y tracción trasera. Una cierta contradicción. 

No hay nada que indique este curioso “downsizing”, salvo los indicativos en la parte inferior del coche. Lo ves, y piensas que estás ante un devorador de kilómetros con seis cilindros y cuatro por cuatro. Pero no.

¿Que se queda corto? Vamos a ver. Desde luego es un automóvil que cumple de sobra para hacer largos viajes, no es que nos hayamos ido a un tricilíndrico, demonios… Son 218 CV de lo más honrados que te hacen desplazarte con cierta soltura. No olvidemos que estamos ante un “tanque” de más de dos toneladas de peso… Y sí, a veces se nota. Sobre todo si has probado unidades con motores más grandes. Notas que en autopista, a velocidades legales, va bien, pero amigo… Sabes que tiene hermanos que pueden ir mucho mejor. Mover semejante anatomía con soltura no es tarea fácil. Pero claro, es el peaje que tienes que pagar por llevar dos cilindros menos y un motor, en resumidas cuentas, más pequeño…

Lo que pienso que ha querido hacer BMW con esta versión es seducir al comprador del X5 que no ve necesaria la tracción total ni un motor superlativo. Ese comprador, que dicho sea de paso, cada vez existe más, que pone la estética como primera variable de compra. Que quiere ir en un coche, llamémosle de representación, con una postura de conducción elevada y con un gran espacio interior. Que, ojo, es tan legítimo como cualquier otro. De hecho, creo que cada vez abunda más en nuestras ciudades. Porque, ¿cuántos SUV premium has visto de los que podrías asegurar que jamás saldrán del asfalto? En las puertas de algunos colegios y en los aparcamientos de los grandes centros comerciales encontraríamos muchos, ¿verdad?

A nivel interior, casi nada que reprochar. Materiales de primera, una calidad percibida fuera de toda duda, y un equipamiento de absoluto lujo.  Y dirás… ¿Por qué ese “casi”? Pues por lo que me suele llamar la atención de los salpicaderos de BMW: El enorme parecido entre casi todas las series. Me gusta que esa tendencia empiece a romperse en los nuevos lanzamientos de la marca.

Eso sí, no olvidemos que estamos ante un BMW, una de las marcas que ofrece un mayor abanico de elementos opcionales que permite personalizar nuestra unidad hasta casi el infinito. Así que, si vas a tirar de configurador con los únicos límites de tu imaginación y tu cartera… la cuenta será muy, pero que muy abultada. Haz un ejercicio mental, por favor: Elimina las opciones que realmente consideres superfluas para el uso que le vas a dar al coche y considera las opciones que tienes en la gama X5 con tracción total y motor de seis cilindros. ¿Realmente hay tanta diferencia? Quizás por el mismo dinero, o un poco más, te puedes ir a una de las versiones X5 “de toda la vida”. Estéticamente no lo notarás, pero te aseguro que dinamicamente notarás las diferencias.

Porque todavía hay gente, como mi madre, que no sabe qué significa el concepto SUV. Les sigue llamando “todoterreno”. Y, francamente, ¿has visto algún “todoterreno” tracción trasera?

Si además de leernos quieres escucharnos, aquí te dejamos el link al programa de radio Vuelta Rápida GT en el que charlamos largo y tendido sobre este modelo de BMW. A partir del minuto 103.