Pruebas VRGT
Porsche Macan Diesel S: El coche perfecto
Pues sí. Para qué os voy a engañar. ¿Qué pasa cuando al señor director de Vuelta Rápida GT se le da a probar un SUV? Que le gusta. ¿Alemán? Que le gusta mucho ¿Diesel? Le […]
Pues sí. Para qué os voy a engañar. ¿Qué pasa cuando al señor director de Vuelta Rápida GT se le da a probar un SUV? Que le gusta. ¿Alemán? Que le gusta mucho ¿Diesel? Le encanta. ¿Con un buen cambio automático? Que se vuelve loco. ¿Ágil y dinámico? Que empieza a salivar de manera obscena. ¿De una marca de Stuttgart? Pues que no se quiere bajar del coche y no lo quiere devolver.
Por Ramón Biosca ( @ramonbiosca)
Porque lo que siento por Porsche no lo puedo poner por palabras. Me gusta demasiado. Y desde que mis circunstancias personales me obligan a renunciar (temporalmente, eso sí, porque no pienso borrarlos de mi lista de futuribles) a los coupés de la marca germana, miro con ojos de lo más golosos a los otros productos que salen de la factoría de Leipzig, que es donde se ensamblan los Cayenne, Panamera y nuestro protagonista, el Macan. Cualquiera de ellos colmaría mis ansias de ponerme al volante de un Porsche.
Sé que a parte del equipo de Vuelta Rápida GT le hace bastante gracia mi querencia hacia los llamados SUV, qué le vamos a hacer, les quiero mucho y tengo que aguantarles… Pero cuando el referido SUV lleva en el capó el escudo de una marca que ha obtenido más de 30.000 victorias en todo tipo de categorías, como las 16 en las 24 Horas de Le Mans, 11 Targa Fiorio, 2 Dakares, 22 victorias en las 24 Horas de Daytona, 26 victorias en F1, 2 Mundiales como motorista, 14 títulos en el mundial de Resistencia… no podemos estar hablando de un SUV en el sentido “peyorativo” de la palabra. (Saludos, Iván Cruz…)
Porque Porsche no hace todoterrenos, ni todocaminos. Porsche hace deportivos. Tirando de memoria, es lo que nos recordó José Antonio Ruiz Escudero, Director de Comunicación de la marca, en la presentación del Macan. Y es que el Macan, con cualquiera de los apellidos que tiene la gama, es un DEPORTIVO con todas las letras.
Lo empiezas a ver al enfrentarte a su planta. Sí, es un coche con el que puedes llevar a los niños al colegio y pasarte por la gran superficie de rigor para hacer la compra. Pero también ves un diseño que te promete que te lo vas a pasar en grande en cualquier carretera virada que te encuentres.
Las promesas que te hace el exterior del Macan siguen ganando argumentos en cuanto accedes al puesto de conducción. Esto no es lo que te habían contado de los SUV. Esto es otra cosa. Te puede recordar a aquel día que pasaste por el concesionario de Porsche y te subiste en el 911 que tenían expuesto para ver qué se sentía. ¡Es que se parece! Y oye, que estos chicos han cogido un volante de 918 Spyder y lo han colocado aquí… Y ojo, la llave a la izquierda. Como cualquier Porsche. Tradición obliga. ¿Qué es eso de arranque sin llave? Aquí no, por favor. Esto promete. Desde luego, se sale de lo común. Y los botones. Porque en un Porsche lo que no falta son botones. Ahí estoy con mi compañero Carlos Enríquez de Salamanca. ¡Abajo el minimalismo en los interiores! Quiero cuantos más botones, mejor.
Arrancas y sí, te das cuenta de que llevas ahí delante un motor diesel. Es el V6 ya conocido en el Cayenne. Si funciona y cabe, ¿para qué cambiarlo? Y sí, es de origen Audi. Pero, demonios, “ajustado” por Porsche. Suena a diesel. ¿No te gusta? Cierra la puerta.
Porque al cerrar la puerta notas otra de “esas cosas” que te hacen ver que no estás a bordo de un coche cualquiera. El aislamiento acústico que consigue la marca de Stuttgart en sus productos, digamos, grandes, es impresionante. Ya puede estar Fernando al otro lado de la ventanilla gritándome que me baje del coche, que no me voy a enterar. Bueno, también hago por no enterarme, pero eso es otra historia…
El Macan S Diesel en movimiento te ofrece todo lo que necesitas. ¿Que tienes que ir al colegio de los niños a un ritmo tranquilo, haciendo una conducción llamémosla… eficiente? Deseo concedido. ¿Que tienes que hacer un largo viaje por autoría hasta la otra punta del país, a un ritmo constante y sin perder tiempo en adelantamientos y demás? Lo harás. ¿Que quieres soltar adrenalina en un circuito cerrado? También puedes, que no se diga.
Porque con el cambio PDK, el modo Sport, y tantas y tantas cosas que te da el Macan, podemos (Uy, lo he vuelto a decir. Mejor diré “puedo”) asegurar que estamos ante el coche perfecto. Y ojo, con 500 litros de maletero. Para meter todos los bultos de una familia y algún encargo que te hagan. No vas a encontrar a ningún rival que te ofrezca el comportamiento, ni la calidad, ni las soluciones del Macan.
Y… ¿De cuánto estamos hablando? Pues puedes acceder a la gama desde 68.000 euros. Sí, ya sé que es mucho dinero. Pero… ¿Cuánto cuesta tener la sonrisa dibujada en la cara cada vez que te pones al volante de tu coche?
Si además de leernos quieres escucharnos, aquí te dejamos el Vuelta Rápida GT en el que hablamos de este modelo http://www.ivoox.com/vuelta-rapida-programa-160-copilotos-06-05-2015-audios-mp3_rf_4452023_1.html# a partir del minuto 87.
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