Subaru Outback 2015. Evolución VS Revolución
En nuestros mercados podemos encontrar grandes sagas de modelos que se han mantenido a lo largo de varias décadas, a lo largo de múltiples generaciones, como las 10 generaciones del […]
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En nuestros mercados podemos encontrar grandes sagas de modelos que se han mantenido a lo largo de varias décadas, a lo largo de múltiples generaciones, como las 10 generaciones del […]
En nuestros mercados podemos encontrar grandes sagas de modelos que se han mantenido a lo largo de varias décadas, a lo largo de múltiples generaciones, como las 10 generaciones del Corolla, las 9 del Civic, las 7 del Golf. En unos casos es un tema de marketing en la que el nombre del coche es una excusa para sacar modelos diferentes dentro de un mismo nicho. Sucesivas “revoluciones” internas hacen que el automóvil que nació con tracción trasera y tres volúmenes pase en ocasiones a ser delantera y compacto. Poco importa que se llame igual, cuando la evolución ha cambiado su esencia.
Por Fernando Gonzalez Ferreira. @FUR_R
En otros casos, de lo que estamos hablando es de una “evolución”, ya que la “revolución” ocurrió ya en la primera generación. Una primera generación que sentara en su día las bases de un producto que a lo largo de los años se ha servido de la tecnología para mantener esas bases y actualizarlas a los nuevos tiempos.
Estamos hablando del Subaru Outback en esta su quinta generación. Quizás no sea la saga más longeva, ya que el primero data de 1995 pero bebe de la fuente del Subaru Leone, precursor auténtico del concepto Outback, pero aún así sigue encajando en esas familias que son fieles a sus orígenes a la vez que devotos de la tecnología.
El Outback nació con un motor bóxer, con una tracción total simétrica permanente y con la forma de un vehículo familiar elevado. Y así permanece en esta nueva versión.
OUTBACK
El Outback Australiano es una zona interior y casi desértica del continente en el que casi no reside población alguna. Extensas planicies con muy poca vegetación y un terreno de arena y roca que son a menudo cruzados por interminables Road Trains que la jalonan con largas estelas de polvo.
Outback es además esa alternativa “robusta” al SUV tradicional que basa su razón de ser en la tracción AWD simétrica y a la seguridad frente a la estética del resto del mercado. Mucho más ligero que esos “road trains” también te permitirá recorrer largas distancias con toda la capacidad de carga que necesitas, y sobre todo, sin importarte lo que discurra bajo sus 4 ruedas motrices. Un Outback no es un todo terreno pero sí un automóvil que te asegura estabilidad sobre cualquier firme incluso mantener el tipo con modelos más adaptados al campo como el Forester al que seguíamos.
Con respecto al anterior modelo se nota una mejor tanto estética como aerodinámica, basada fundamentalmente en el carenado parcial de los bajos y una reducción de sonoridad de un 12% según Subaru.
las cotas se mantienen o aumentan ligeramente, ahora mide 4.815 mm de largo (25 mm. más), 1.840 mm. de ancho (20 mm. más) y la altura se mantiene en 1.605 mm. por lo que el conjunto resulta más esbelto.
POR DENTRO.
Nadie en toda su vida ha comprado un Subaru por el diseño de sus interiores. la verdad es que a los que nos gusta Subaru sabemos que eso de la “belleza interior” es menos importante que la “belleza inferior”, porque no hay más que abrir un capó de un Subaru o mirarlo bajo un elevador para notar que no es un coche normal.
Pero el tema es que en el “interior” también se ha notado un esfuerzo por parte de la marca japonesa. Sigue siendo muy sobrio, pero ahora se juega con las texturas, tonos y brillos de los plásticos con un resultado más que correcto, muy, cómo decirlo… alemán. Además incluye las últimas tendencias en conectividad y programación. Subaru no necesita esto para vender más coches, pero se puede decir que la mejora es bienvenida.
LA RECETA DEL ÉXITO.
la receta es marca de la casa; motor bóxer diésel de 4 cililndros opuestos y dos litros de cilindrada junto con la tracción Symmetrical AWD de Subaru. Pero cuando estás concursando en Master Chef tienes que mejorar esa receta que sabes que nunca te ha fallado con tu familia.
Así que , aunque lo que va en la olla no varía, la preparación de los ingredientes se ha cuidado de la siguiente manera:
El motor para empezar no es exactamente el mismo que la anterior generación; se trata del EE20, mantiene los 150 cv. pero goza de mejoras puntuales y optimizaciones generales. La relación de compresión se ha reducido en la busca de menores emisiones. Al volante se muestra muy similar al anterior, así que sube muy bien de vueltas con el típico soniquete bóxer y tiene pocas vibraciones. Bien. También existe un FB25 de gasolina y dos litros y medio que rinde 25 cv. más, pero independientemente de que no lo hemos probado, este Outback parece hecho a medida para alojar un diésel.
El cambio Lineartronic también está en la receta, pero el del 2015 se ha mejorado en velocidad de cambio y sonoridad gracias sobre todo a una nueva unidad de control con nuevas leyes de cambio. Aquí sí se nota diferencia con el anterior Lineartronic.
Si decíamos cuando lo probamos que era un cambio CVT para ir en modo continuo ya que la simulación de marchas secuenciales no estaba muy conseguida, con el nuevo esto ya no hay problema. Va mejor en modo variador y mejor en modo secuencial. Y lo que voy a decir os va a sorprender; Cuanto más se empina, retuerce y estrecha el camino, más satisfactorio es ir en modo variador, es realmente eficaz y deportivo.
UN TERCER NIVEL DE SEGURIDAD
Hasta ahora el mercado había distinguido entre seguridad activa y pasiva. O lo que es lo mismo, los elementos del coche que pueden evitar una colisión frente a los que se dedican a minimizar sus efectos. Esa distinción hoy en día se ha quedado claramente desfasada y entra en juego otro tipo de seguridad: La Seguridad Preventiva.
Si la seguridad activa tenía su máxima expresión en los sistemas ATV (Active Torque Vectoring) como evolución natural de los controles de estabilidad y la seguridad pasiva hacía lo propio en cuanto a zonas de deformación controlada y células de supervivencia, Subaru puede sentirse orgulloso de que el nuevo Outback incluye toda esta tecnología y está al nivel de los mejores.
Pero en el terreno más desconocido de la seguridad preventiva es ciertamente difícil evaluar esa capacidad del automóvil de “saber” qué está pasando a su alrededor: o lo que es lo mismo, qué tal ve y oye nuestro coche.
CUATRO OJOS VEN MÁS QUE DOS.
Pero también es cierto que dos ven más que uno, mucho más. Y es que todos los sistemas de seguridad preventiva que están en el mercado se componen de una multitud de sensores pero una sola cámara, mientras que en el caso del “EyeSight” de Subaru contamos con un sistema estereoscópico. Se puede decir que el Outback ve lo que pasa de la misma manera que quien lo conduce, tal y como nos comentó en la presentación el Jefe de prensa de Subar España, Iñigo Trasmonte.
Que sea estereoscópico permite principalmente poder medir profundidad y ángulo, por lo que la visión es similar a la nuestra. No entraremos en temas técnicos como que el EyeSight puede llegar a valorar varios escenarios en función de la situación, optando por acercar las pastillas de freno en caso de que la colisión sea inevitable o incluso actuar vectorialmente sobre la dirección en caso de que evalúe que es posible una maniobra de esquiva.
Eso naturalmente nunca lo vas a notar, lo que sí vas a notar es que este sistema se percibe mucho más natural al volante que la competencia. Está claro que ya hay muchos modelos en el mercado que frenan y giran el volante por ti, pero casi nunca es lo que tú habrías hecho si hubieses tomado el control. El EyeSight tampoco es perfecto, pero se acerca mucho.
¿EN QUÉ NICHO METEMOS AL OUTBACK?
De momento en ninguno porque está más vivo que nunca, pero si hablamos de nichos de mercado, no es fácil encajonarlo en ninguno.
Es demasiado coche, demasiado bueno en demasiadas cosas. Dinámica de conducción, espacio interior, calidad de acabados, capacidad de carga, deberíamos llamarle SUV, pero los SUVs no hacen ni la mitad de cosas que el Outback ni la mitad de bien.
Lo hemos llevado por autopista y es rápido y cómodo, le hemos buscado las cosquillas en carreteras ratoneras y ha mantenido el tipo estupendamente, hasta le hemos metido por estrechos caminos de tierra a una velocidad de carretera convencional y la confianza que proporciona hace que un “muñones” como yo se sienta Ari Vatanen Subiendo Pikes Peak.
¿El precio? de 29.900 a 36.900 €. Además con la versión de gasolina incluye el mismo sistema SI Drive que monta el STI, y con las versiones CVT Lineartronic el EyeSight te sale gratis… regalado vaya.
Si además de leernos quieres oírnos, aquí te dejamos el enlace al programa Vuelta Rápida GT donde hablamos de este modelo. VRGT- Subaru Outback